domingo, 27 de junio de 2010

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Hola, mi nombre es Melisa, yo realizo un programa de radio que se llama El Pensadero en Villa Gesell. Entre las columnas que salen al aire existe una llamada "Viajeros" en donde los protagonistas cuentan en primera persona diversas experiencias y recuerdos de viaje. Como los viajeros están en diferentes puntos del globo lo que hacemos que enviarles una serie de preguntas que ellos mismos graban en la compu o con algún aparato que grabe en mp3 y al cual nosotros le ponemos música y sonido y difundimos.
Si estás interesado te enviamos vía mail las preguntas
La sección de entrevistas se emite los sábados a las 11 hs, con repeticiones los domingos a las 22 hs, los lunes a las 17 hs, miércoles a las 9 hs y viernes a las 3 de la madrugada. Podés escucharlo en vívo a través de la página web de la radio
www.elsonidodelmar.com.ar
Saludos!!!

Melisa


Muchas gracias. Por allí andaremos.
Juan Carlos

sábado, 26 de junio de 2010

Fin cuesta de Miranda

Cuando uno ya cree conocer las vistas más lindas, aparecen otras y otras. Recordábamos aquello "de qué lindo es mi pais paisano", mientras mirábamos los peligros de transitar por aquellos caminos (obsérvese el derrumbe). Los farallones nos recordaban que pertenecían a la formación geológica del carbonífero-pérmico, con predominio del óxido de hierro, razón de su color rojo carmesí (recuerdese que allí se levantan Los Colorados).







Vimos y atavesamos puentecillos, pasajes estrechos, e interesantes carteles. Habíamos llegado al punto más alto y ahí nos detuvimos, en el mirador conocido como Bordo Atravesado, ubicado a los 2.020 m.s.n.m. A lo lejos alcanzamos a ver los paredones del parque nacional Talampaya.










Cuando pasamos por el homenaje a don Vicente Bolleli, no dudamos en sacarnos la foto de rigor; fue el autor del camino, una construcción que le llevó desde 1918 a 1928. La Cuesta recuerda al Capitán Juan de Miranda, el que se consideró propietario de estas tierras, despojadas a los kakanes. Lamente no haber reconocido el sitio histórico conocido como “La Pelea”, donde el coronel Felipe Varela venció a José Linares.







Comenzamos la cuesta abajo, con la promesa de caminos más amigables e igual de lindos. De todas maneras, no dejaban de ser peligrosos por algunas bajadas abruptas.


Por suerte, la destreza de nuestra conductora nos llevaba por el buen camino...









Claro que recién respiramos mejor cuando llegamos a Villa Unión, y festejamos con una comida de aquellas.

domingo, 20 de junio de 2010

Cuesta de Miranda

Lo que se encuentra al final de una curva, siempre es un misterio. Pero la nube que nos acompañaba, casi como mensajera de viejos dioses diaguitas, nos inspiraba confianza. Nos encontramos de pronto, con un mirador de ensueño, no podíamos seguir de largo.









El valle del río Miranda era una fiesta para los sentidos. El fresco aire, un sol radiante, policromia de colores y de sensaciones en silencio, todo nos preparaba para una fiesta, la eufonía de los sentidos.












Decidimos hacer un alto para admirar aquellos profundos tajos, abruptos, como pidiendo respeto al viajero.
Pero aún en aquellos descensos tan salvajes, la Pacha Mama, la Madre Tierra, nos regalaba flores.
Nuestra nube guía nos marcaba lo que no podíamos dejar de admirar, lo que luego nos costaba dejar de mirar.
Nos preguntabamos con Miguel Ángel, si por allí habría suris. Los suri o avestruz, es una figura que se encuentra repetidamente plasmada en la cerámica santamariana. Con su figura, los vallistas simbolizaban a las nubes cargadas de agua que luego volcarían en la tierra para fecundarla. El plumaje de esta ave es de color gris, lo que les lleva a imaginar que eran semejantes a las nubes que traen la lluvia. Estas aves, al percibir que se aproximaba una tormenta, corrían de un lado a otro, moviendo sus alas, inflando sus plumas, con lo que se asemejaban a las nubes que son arrastradas de un lado a otro por los vientos, hasta que, una vez que se unen entre ellas, producen la lluvia. También en este animal se ve la cruz dibujada en el cuerpo, lo que simboliza a los cuatro vientos: del norte, sur, este y oeste, que en la creencia de estos pueblos se unían en la nube para generar la caída del agua.

Divagues que afloran por no tener palabras para describir la belleza. Todo era armonía y perfección, todo el paisaje inspiraba admiración y deleite.
¡Que hermoso viaje!

sábado, 5 de junio de 2010

Cuesta de Miranda

La Cuesta de Miranda esta situada a 35 Km. al Oeste de Chilecito, sobre la ruta 40. Tiene un trazado de curvas y contracurvas (unas 400) sobre unos 12 kms., muy poco pavimento, más de la mitad es de ripio firme. Es uno de los fuertes atractivos de la provincia y es el paso que une Chilecito con La Unión, pasando entre el estrecho que se forma con la sierra de Famatina al norte y la sierra de Sañogasta al sur, continuando por arriba del valle que forma el río Miranda.
La vista del cauce del río era un anticipo tímido de lo que vendría. Para mi sobrina Noelia, el paisaje, lejos de imponerle temor, la liberaba y se sentía una cabra. Pusimos una mirada sobre el camino que nos había traido, miramos lo que nos esperaba, y comenzamos a disfrutar la policromía con dominantes tonos de bermellones con manchones verdes.





Tajos profundos sobre nuestros pies, el azul cielo apenas alterado por una mancha blanca.....

...y desde la altura nos maravillamos con lo que parecía ser la entrada a una dimensión desconocida.